La Confederación Interamericana de Educación Católica (CIEC) fue fundada el 6 de junio de 1945 en Bogotá, Colombia, con ocasión del Primer Congreso Interamericano de Educación Católica.
Fundadores:
Monseñor Ismael Perdomo Borrero
Arzobispo de Bogotá, gran impulsor de la educación católica y anfitrión del Congreso fundacional. Su respaldo fue decisivo para convocar a las delegaciones internacionales.
Padre Jesús María Fernández, S.J.
Sacerdote jesuita, organizador principal del Congreso y primer Secretario General de la CIEC. Su liderazgo intelectual, pastoral y organizativo fue fundamental para dar forma a la Confederación.
Apoyos institucionales:
La fundación de la CIEC contó con:
- El respaldo oficial de la Conferencia Episcopal de Colombia, promotora del Congreso.
- El apoyo del Vaticano, que alentaba la creación de organismos regionales de coordinación educativa en el continente.
- El compromiso de la Universidad Pontificia Javeriana y la Confederación Nacional de Colegios Católicos de Colombia (hoy CONACED).
Participación internacional:
En el Congreso fundacional participaron delegaciones de varios países de América Latina, entre ellos: Argentina, Brasil, Chile, México, Perú, Uruguay, Venezuela, entre que firmaron el acta de constitución y se comprometieron a consolidar una red continental de educación católica.
Naturaleza jurídica de la CIEC:
La CIEC nació como una organización de derecho civil con sede en Colombia, dotada de personería jurídica propia para operar institucionalmente al servicio de la Escuela Católica del continente.
Según el Código de Derecho Canónico (cc. 321–326), la CIEC es reconocida como una asociación privada de fieles. Esto significa que:
- Fue constituida libremente por fieles católicos (laicos y clérigos) con fines apostólicos y educativos.
- Tiene sus propios estatutos, respetuosos de la doctrina y disciplina de la Iglesia.
- Actúa en nombre propio, no en nombre oficial de la Iglesia, aunque en comunión con las conferencias episcopales y con el reconocimiento eclesial que le otorga legitimidad pastoral.
Esta doble dimensión —civil y canónica— le permite a la CIEC trabajar con autonomía operativa y al mismo tiempo con identidad eclesial, al servicio de la misión evangelizadora de la Iglesia en el ámbito educativo.
Composición de la CIEC:
La CIEC está conformada por:
- Las federaciones nacionales de educación católica de los países del continente americano.
- Los departamentos de educación católica de las conferencias episcopales nacionales, cuando no existen federaciones específicas.
- Además, cuenta como asociados con: Congregaciones religiosas dedicadas a la educación y redes continentales de escuelas católicas y otras instituciones que comparten su misión evangelizadora.
Misión interamericana:
Desde su origen, la CIEC se constituyó como un organismo interamericano de carácter eclesial y educativo, comprometido con la articulación, acompañamiento y fortalecimiento de la Escuela Católica en América, promoviendo su identidad, misión evangelizadora y compromiso con la formación integral de la persona, en fidelidad al Magisterio de la Iglesia y a los desafíos de cada época.
